El jefe de ministros de Argentina, Jorge Capitanich, advirtió este sábado que el gobierno castigará aumentos abusivos de los precios o desabastecimiento de productos, luego de la fuerte devaluación del peso ocurrida esta semana.

En una serie de mensajes en Twitter el ministro advirtió que desde la secretaría de Comercio se realizará “un monitoreo permanente para garantizar el abastecimiento a precios razonables y justificados de electrodomésticos, automotores, artículos electrónicos y otros bienes con alto componente importado e insumos de uso difundido”.

La advertencia se produce al cabo de una semana en la que el gobierno indujo una brusca devaluación del peso que llegó a perder 14% de su valor en dos días y cotizó a 8 dólares en las pizarras aunque trepó a 12 en el mercado informal.

La fuerte devaluación despertó el temor de los argentinos a una escalada en la inflación que estimaciones privadas cifran en 30% anual.

Este sábado una tradicional cadena de venta de electrodomésticos suspendió las ventas a través de su portal en Internet, mientras otras restringieron la oferta de productos por esa vía, aunque sus tiendas permanecieron abiertas y operaron normalmente, constató la AFP.

En casas de ventas de insumos para la construcción también hubo reticencia a vender por temor a los precios de reposición de stock.

“No sabemos a qué precio hay que vender los productos importados, como cerámicas, por eso preferimos decirle al cliente que no hay stock hasta ver qué sucede con el dólar la semana que viene”, dijo a la AFP un vendedor de una cadena de venta de insumos para la construcción.

La prensa local reportó situaciones similares en las concesionarias de automóviles y agencias de viajes.

Desde el lunes el gobierno permitirá la compra de dólares para ahorro a personas físicas, al morigerar el odiado cepo a la compra de divisas que rige desde 2011.

La medida se había instrumentado para proteger las reservas del Banco Central que de todas formas cayeron de unos 52.000 millones de dólares a 29.000 en los últimos años.

Capitanich advirtió que se vigilará en especial el precio y el abasto de “insumos difundidos como el acero, aluminio, plástico, etc, que marcan referencia de precios en la cadena de valor”.

El gobierno “actuará con todo el rigor de la ley en casos de abusos por parte de los formadores de precios”, dijo.

También ratificó la vigencia del acuerdo de precios sobre un centenar de productos de primera necesidad alcanzado el 3 de este mes con productores y cadenas de supermercados, en un pacto que el gobierno anunció con bombos y platillos.

“El programa ‘precios cuidados’ continúa y se extiende a todo el país a partir del compromiso de proveedores y supermercados”, dijo.

Pero este sábado Alfredo Coto, propietario de una amplia red de supermercados que lleva su apellido y adherente al pacto, admitió que la violenta devaluación fragiliza el acuerdo porque “hará oscilar los costos” de los productos.