Con motivo de la celebración de Halloween, este jueves 31, la experta en Prevención de Riesgos de la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), Paula Zapapa, alertó a los papás a que, sumado los cuidados que se debe tener respecto al tipo de golosinas que los niños consumen esa noche, tomen precaución respecto a los elementos tóxicos que muchas veces contienen las máscaras y maquillajes.

A quienes ya tienen preparado su disfraz y su bolsa para recolectar dulces, la profesional sugirió fijarse en la procedencia y rotulación de los productos, ya que máscaras, adornos, trajes y juguetes pueden contener elementos tóxicos -como el tolueno- o estar hechos de materiales altamente inflamables.

“Las máscaras deben tener orificios suficientes para poder respirar bien, lo que parece obvio, pero no siempre es así. La clave es no comprar en el comercio informal, pero además mantenerse alejado de las fuentes de calor, por lo que el uso de velas o antorchas se puede suplir con una linterna”, expresó Paula Zapapa.

Dijo que especial cuidado hay que tener con los más pequeños.

“A la hora de maquillarlos, use productos hipoalergénicos para niños, evitando que entren en contacto con los ojos. Tenga cuidado también con las capuchas con cordones en la zona del cuello y accesorios con lazos, y evite que sus hijos usen trajes, zapatos y máscaras holgadas o muy grandes, que puedan generar caídas. Favorezca el uso de materiales reflectantes y luminosos, que hagan a los niños fácilmente visibles en la oscuridad”, manifestó la experta.

Aconsejó también que “los niños deben saber de antemano que no tienen que entrar a una casa desconocida y que deben caminar por la vereda. Los padres deberían planificar la ruta por un vecindario con casas conocidas y bien iluminadas”, puntualizó la experta de la ACHS.

Y como las medidas de seguridad nunca sobran, poner a los más chicos una tarjeta con su nombre, dirección, teléfonos y nombre de los padres es siempre una buena idea.

Por otra parte, “los padres deben enseñarles a sus hijos a no causar destrozos ni reaccionar en forma violenta si alguien no les da dulces”, advirtió Paula Zapapa.

En la casa, hay que asegurarse de que quien está tocando el timbre es efectivamente un niño y no un delincuente que se aprovecha de esta fiesta.

Cuando los niños llegan con caramelos, “es muy importante fijarse en que estos productos tengan resolución sanitaria, verificar la fecha de vencimiento y no recibir dulces que vengan abiertos, golosinas caseras o de procedencia dudosa”.