Los malos resultados obtenidos por las fiscalizaciones que la Junta Nacional de Jardines Infantiles, Junji, realizó a varios jardines infantiles y salas cunas motivó al abanderado del PRO, Marco Enríquez-Ominami, a presentar sus propuestas en torno a la educación parvularia.
Dentro de sus propuestas está el reducir a 30 el número de niños por educadores de párvulos y a cinco los lactantes por técnico en educación parvularia.
Además, el aspirante a La Moneda planteó la necesidad de la acreditación de la Junta Nacional de Jardines Infantiles, Junji, sea requisito para tener uno de estos establecimientos.
En esa línea, Marco Enríquez-Ominami criticó fuertemente a la directora de la Junji, Francisca Correa, por los vínculos que tuvo con la red de jardines infantiles “Vitamina”, la que ha sido varias veces denunciada.
La presidenta del PRO y candidata a diputada por el distrito 23, Patricia Morales, indicó que ella misma ha denunciado en varias ocasiones las irregularidades de los jardines infantiles sin tener respuesta de las autoridades.
De paso, aprovechó de criticar la forma en que el Congreso discute los proyectos de ley relacionados con el tema.
Patricia Morales, además, relató su experiencia personal como apoderada de un jardín infantil “Vitamina”, vinculados a la actual directora de la Junji, donde una de sus hijas fue víctima de negligencia por parte de las parvularias, mismo jardín donde se fugó un niño.
