Los reguladores estadounidenses publicaron una revisión científica de datos que muestra que los cigarrillos mentolados son más difíciles de dejar que los normales, y solicitó información pública acerca de una posible prohibición.
Los cigarrillos de sabor mentolado no están vinculados a un mayor riesgo de enfermedad, pero suponen “un riesgo de salud mayor que los observados en los cigarrillos no mentolados”, afirmó la Administración de Alimentos y Medicamentos estadounidense (FDA).
La FDA afirmó que “busca información adicional para ayudar a la agencia a tomar decisiones informadas sobre los cigarrillos mentolados” y con tal fin abre un periodo de 60 días abiertos a comentarios públicos relacionados con “las posibles opciones regulatorias”.
La revisión independiente de la FDA y la literatura científica disponible muestra que los nuevos fumadores prefieren “sustancialmente” los cigarrillos mentolados.
Los fumadores de este tipo de tabaco tienen más probabilidades de fumar su primer cigarrillo cinco minutos después de despertarse, lo que sugiere que el sabor mentolado está vinculado a una “dependencia mayor”, afirmó la FDA.
Además para los fumadores de mentolados, particularmente los afroamericanos, fue más difícil dejar de fumar que para aquellos que fuman cigarrillos normales.
“Esto es consistente con las observaciones de que los fumadores de tabaco mentolado parecen depender más de la nicotina que los que no fuman mentolados, lo que puede ser un importante factor en el éxito al dejar de fumar”, afirmó la revisión de la FDA.
Los cigarrillos mentolados constituyen un cuarto del total de ventas en Estados Unidos y son particularmente populares entre los jóvenes fumadores afroamericanos, según muestra la investigación.
“Los cigarrillos mentolados plantean problemas de salud pública”, afirma la comisaria de la FDA, Margaret Hamburg.
“La FDA está comprometida con un enfoque basado en la ciencia que se ocupa de las cuestiones de salud pública planteadas por los cigarrillos mentolados, y la opinión pública nos ayudará a tomar decisiones más informadas acerca de cómo tratar este importante asunto en el futuro”, dijo.
La asociación Campaign for Tobacco-Free Kids afirmó que la última revisión científica es “sólida” y afirmó que “debería empujar a la FDA a reaccionar tan pronto como posible para prohibir los cigarrillos mentolados en Estados Unidos”.
Los hallazgos reproducen los del Comité de Asesoramiento Científico de Productos de Tabaco de la FDA, que en marzo de 2011 concluyó que eliminar el tabaco mentolado del mercado beneficiaría a la salud pública.
El consumo de tabaco mata a más de 400.000 personas anualmente en Estados Unidos y cuesta 96.000 millones a la salud pública, según datos de Campaign for Tobacco-Free Kids.