Familiares de presos pidieron este jueves al presidente estadounidense, Barack Obama, que presione al nuevo líder chino para que libere a 16 detenidos, diciendo que los derechos humanos deben ser una prioridad en la primera cumbre entre ambos dirigentes.

El presidente Xi Jinping se reunirá por primera vez con Obama desde que asumió el cargo, en un lugar aislado del desierto de California, con el objetivo de profundizar la confianza mutua.

“Esta cumbre no es solamente sobre la profundización de una amistad personal. Es una cumbre entre los presidentes de dos países y deben tener como objetivo la construcción de una sociedad más justa”, dijo Chen Guangcheng, un abogado autodidacta ciego que protagonizó una dramática fuga desde su arresto domiciliario, para refugiarse en la embajada estadounidense en Pekín, el año pasado.

“El presidente Obama debe dejar de lado la diplomacia centrada en el comercio en favor de una diplomacia centrada en los derechos humanos”, dijo Chen -que cursa estudios en Nueva York- en una conferencia de prensa en Washington.

Grupos de derechos humanos planean manifestaciones para presionar por la liberación de los “China 16″, quienes fueron sentenciados en conjunto a cuatro cadenas perpetuas y 165 años adicionales.

Entre los 16 presos está Chen Kegui, sobrino de Chen, detenido, según activistas, como represalia de las autoridades de la provincia de Shandong (este), por la fuga de su tío.