El Parlamento chipriota, reunido en sesión extraordinaria, adoptó el viernes por la noche una ley sobre la reestructuración del sistema bancario, en el marco de plan de rescate que Nicosia debe concluir antes del lunes con sus socios europeos para evitar la bancarrota.
Los diputados levantaron luego la sesión, aplazando para más tarde el examen de otros cinco textos del plan, de los cuales el más polémico buscaría establecer una tasa excepcional que podría elevarse a 15%, según la televisión pública, sobre los depósitos bancarios mayores de 100.000 euros.
Antes, el Parlamento había aprobado la creación de un Fondo de solidaridad, primera de las ocho leyes del plan de rescate alternativo.
En el inicio de la sesión, los diputados votaron el texto que dispone la creación del Fondo de solidaridad y otro que limita los movimientos de capitales para evitar una presión excesiva sobre los bancos cuando reabran sus puertas, el martes próximo.