México ha debido sacrificar 2,5 millones de aves desde que hace tres semanas detectó un brote de gripe aviar en el estado de Jalisco, en el oeste del país, informó el martes el Ministerio de Agricultura y Ganadería, que agregó que otros 900 mil animales están afectados.

“Se han detectado 3,4 millones de aves afectadas. De este universo, el número de aves que han sido sacrificadas como medida de control y erradicación es de 2.5 millones”, indicó la dependencia en un comunicado.

El ministerio, que recordó que el virus (H7N3, de alta patogenicidad) no supone un riesgo para el consumo humano, dijo haber revisado 148 granjas avícolas, que incluyen una parvada de 16,5 millones de animales y de las que en 31 se detectó la presencia de la enfermedad, aunque faltan los resultados de otras 83.

Las autoridades mexicanas decretaron un dispositivo de emergencia, que incluye un área de cuarentena en torno a las granjas aledañas al foco inicial y otras medidas de control.

Tras haber importado un millón de vacunas de Pakistán, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria anunció que había desarrollado una semilla vacunal que entregará a cuatro laboratorios certificados para que produzcan “más de 80 millones de dosis, en una primera etapa”.

El brote fue detectado el 20 de junio en una zona de granjas que comprende los municipios de Acatic y Tepatitlán, donde se concentran la principal zona avícola de Jalisco, el estado mexicano que lidera la producción de huevos con unos 90 millones de gallinas.