La estadounidense Lindsey Vonn se aseguró el primer puesto final de la clasificación general de la Copa del Mundo de esquí alpino por cuarta vez en su carrera, tras ganar este viernes el eslalon gigante de Are (Suecia), su undécima victoria de la temporada.

Con más de 554 puntos de ventaja sobre la segunda clasificada, la eslovena Tina Maze, la estadounidense no puede ser alcanzada cuando restan cinco carreras esta temporada.

“No tenía nada que perder, pensé sólo en divertirme. Esto es completamente loco”, declaró Vonn.

Ya en cabeza en la primera manga, la estadounidense se impuso al final delante de la italiana Federica Brignone (a 48 centésimas) y a la alemana Viktoria Rebensburg (a un segundo y 5 centésimas), líder de la clasificación de la disciplina, mientras que cuarta fue la francesa Tessa Worley.

A sus 27 años, la estrella del esquí alpino femenino se hizo de esta forma con su cuarto gran globo de cristal, que se le había escapado por tres puntos en 2011 en beneficio de la alemana Maria Höfl-Riesch.

En la historia del esquí alpino femenino, sólo la austríaca Annemarie Moser-Pröll, que se impuso seis veces, tiene más títulos.

Vonn, que firmó en Are la 52ª victoria de su carrera en el circuito, se hizo también con la Copa del Mundo de descenso y de supercombinada, a las que debería unir salvo accidente la Copa del Mundo de supergigante el 15 de marzo en la finales de Schladming, en Austria.

La estadounidense sigue de esta forma en carrera por el globo de la clasificación general del gigante, en el que tiene una desventaja de 95 puntos respecto a la alemana Viktoria Rebensburg.

Debido a ello, está obligada a imponerse en la última prueba de la temporada en esta especialidad, contando además con una salida de pista de la germana.