Estimados BioBioChile:
Desde hace 34 años trabajo en las aulas, soy profesora y vivo en Talca.
El 1 de marzo todo el personal del Liceo Abate Molina fue llamado para comenzar con las labores académicas del año. Lo anterior parecería normal, pero el establecimiento educacional está siendo reconstruido desde hace 2 semanas.
Los profesores en su mayoría optaron – de mala forma – por realizar las clases en el mismo lugar en donde se desarrollan las faenas de reconstrucción.
Los docentes fueron consultados el año pasado durante un consejo académico y nadie dimensionó la magnitud de las obras. Se actuó para caer bien y evitar acciones represivas por parte del director del liceo y el DAEM.
Denuncié esta situación abiertamente en asamblea de profesores, pues:
1.- Es imposible continuar nuestra labor en este ambiente de desorden, polvo, ruidos, paseos de jornales, obreros, capataces, maquinarias, etc.
2.- Se vulneraron nuestros derechos como trabajadores.
3.- Estamos en una situación excepcional, pero no existe flexibilidad de ningun tipo, incluso la inspectora general nos intimida por impuntualidad de 5 minutos o por salir a hidratarnos o a despejarnos del calor y el polvo tóxico.
4.- La mayoría de los docentes promedian 50 años de edad y la salud de algunos se verá resentida con esto, y aumentarán las licencias médicas a medida que transcurran los días en este ambiente hostil.
5.- Algunos apoderados solicitaron que sus hijos continuarán desarrollando sus labores académicas aquí, en medio de las obras.
6.- Van a funcionar 50 cursos, en 25 salas. Los alumnos estarán hacinados en el segundo piso, en salas recién remodeladas, aún sin pintar, y el resto agrupado en el patio central del primer piso.
7.- El polvo provocado por las obras continuarán hasta el fin de las faenas.
8.- El ruido propio de los estudiantes se verá aumentado por el trabajo de reconstrucción.
9.- Pese a que todavía no es invierno, ¿dónde van a ubicar a los alumnos durante la lluvia?
10.- Son más de 2 mil alumnos, cursos de 45 alumnos de enseñanza media y tres cursos de séptimo y octavo básico.
11. Somos un establecimiento de excelencia, pero ¿tendremos buenos resultados académicos bajo estas condiciones?
12.- No existen evaluadores o supervisores de alguna entidad que se preocupen del cumplimiento de los requisitos de seguridad, tanto para los trabajadores como para los estudiantes.
Durante el consejo, el director pidió disculpas, se enredaba sólo, y solicitó comprensión, bajando el perfil al problema.
El lunes 5 de marzo debemos volver a trabajar en estas condiciones.
A.C. Liceo Abate Molina, Talca
