Para algunas personas la Navidad puede llegar a ser una verdadera tortura. No nos referimos a aquellos que odian los villancicos o que no quieren gastar dinero, sino a quienes realmente sufren porque ciertos aspectos de esta fecha les provocan malestar.
Si no nos creen, te mostramos 5 cosas recopiladas por los editores de revista Prevention y Salud.com, que pueden ser un fastidio para algunos durante estas fiestas…
1. Decoraciones que acumulan polvo
Durante once meses todos tus adornos y luces navideñas permanecen almacenadas, por lo que pueden acumular polvo y hasta desarrollar hongos. Esto puede provocar congestión nasal, ojos llorosos y erupciones en la piel en las personas más sensibles. Por ello es bueno guardar todas estas cosas en envases herméticos y en un lugar seco.
2. Exceso de comida
Debes tener ojo no sólo con los alimentos que podrían ocasionarte una reacción adversa como maní, chocolate, mariscos, pescado o leche. También debes procurar no excederte con la comida durante la cena de Nochebuena, pues podrías lamentar las consecuencias al día siguiente. Disfruta del banquete, pero ojo con lo que consumes, ya que podrías sufrir gastritis, indigestión, acidez o incluso gastroenteritis.
3. Combinación de olores
El exceso de velas perfumadas, infusiones de popurrí, sprays y el sin fin de cosas que hacen que tu casa “huela a Navidad”, pueden causar irritación en la nariz y la garganta de las personas sensibles a las alergias. “Las velas, en particular, son una fuente cada vez más reconocido de la contaminación del aire en interiores”, dice Horne. “Lo mismo pasa con los sprays y otros tipos dedesodorantes ambientales, que pueden liberar muchos tipos diferentes de compuestos nocivos, que pueden generar reacciones adversas en pacientes alérgicos.”
Lo mejor es aromatizar el ambiente con olores naturales como un popurrí natural hecho con palos de canela y clavos de olor. En cuanto a las velas, prefiere las que están hechas con cera de abeja o de soja.
4. Compras a última hora
El estrés causado por las compras de última hora puede obstaculizar tu sistema inmune y ser un desencadenante de un ataque de asma, según Horne. Las sustancias químicas liberadas por el cuerpo durante momentos de estrés pueden causar que los músculos alrededor de tus vías respiratorias se estrechen, lo que hace difícil respirar.
Inhalar profundo no puede detener el caos de la temporada, pero puede calmarte, así que ponlo en práctica.
5. Intoxicaciones con alcohol
Durante Navidad y Año Nuevo incrementa el consumo de bebidas alcohólicas, aumentando las intoxicaciones y los accidentes de tránsito. Así que consume con moderación y evita darle una preocupación a tus seres queridos.