El gobierno japonés declaró el viernes el apagado en frío de los reactores de la accidentada central nuclear de Fukushima, lo que significa que la temperatura en las vasijas de los reactores está estabilizada y que las emisiones radiactivas están controladas, indicó la prensa nipones.

De esta forma, nueve meses después del accidente provocado por sismo y el tsunami del 11 de marzo, el gobierno cumple con la segunda etapa de su programa de control de la central, sin que eso implique que la crisis esté resuelta, indicaron las fuentes.

Los reactores de la central de Fukushima “alcanzaron el estado de apagado en frío”, declaró el primer ministro Yoshihiko Noda, citado por las agencias de prensa japonesas.

Eso significa que la temperatura de las vasijas de los reactores se mantiene en forma estable por debajo de 100 grados Celsius.

“La Etapa 2 está terminada y el sitio está de ahora en más estabilizado” para permitir la solución del accidente, agregó el primer ministro.

El estado de apagado en frío era uno de los objetivos clave de la “Etapa 2 del plan de trabajo” formulado por la compañía Tokyo Electric Power (Tepco) para terminar con la catástrofe, la peor que haya conocido la industria nuclear en el mundo desde Chernobyl hace 25 años.

El fin de la Etapa 1, que consistía en instalar medios de enfriamiento autónomos, había sido anunciado en julio pasado.

La temperatura en el fondo de las vasijas de los reactores 1 a 3, los más dañados, pasó por debajo de los 100 grados Celsius en agosto y septiembre pasados y desde entonces ha sido estabilizada con sistemas de refrigeración permanentes.

Inicialmente, el estado preveía culminar la etapa 2 en enero de 2012, pero luego decidió adelantar el calendario y logró cumplir con los nuevos plazos.

El hecho de haber alcanzado la Etapa 2 no significa el fin de la crisis, advirtió el portavoz del gobierno japonés Osamu Fujimura.

En el caso de Fukushima Daiichi, donde el combustible entró en fusión, perforó las vasijas y se volcó en parte en el fondo del recinto de confinamiento de tres de los seis reactores, la expresión “apagado en frío” tiene un significado diferente a cuando se utiliza en circunstancias normales para operaciones de mantenimiento.

Sin embargo, el fin de la Etapa 2 significa que los riesgos son mucho menores que antes, indicaron Tepco y la agencia nipona de seguridad nuclear.