La Iglesia Católica irlandesa publicó el miércoles nuevos informes que denuncian casos de abusos pedófilos cometidos por sacerdotes desde 1975, así como la falta de reacción al respecto de las autoridades eclesiásticas en seis diócesis de Irlanda e Irlanda del Norte.

Las investigaciones realizadas por un organismo de la iglesia, la oficina nacional de salvaguarda de los niños, demuestran que los casos de pedofilia fueron ocultados en gran parte en la época.

En la diócesis de Raphoe (noroeste de Irlanda), 52 casos de abusos pedófilos cometidos por 14 sacerdotes fueron denunciados a la policía entre enero de 1975 y agosto de 2010.

“Actos atroces fueron cometidos por sacerdores (…), actos que hubieran debido ser tratados (…) de la manera más firme”, afirmó el obispo de Raphoe, monseñor Philip Boyce.

“Está claro que errores de juicio importantes fueron cometidos por los obispos que se sucedieron” al frente de la diócesis, señala el informe sobre Raphoe.

“Se otorgó demasiada importancia a la situación de los sacerdotes acusados, y demasiada poca a las necesidades de los demandantes”, dice el texto.

Una investigación similar sobre la diócesis de Tuam (oeste) da cuenta de 25 demandas que conciernen a 18 sacerdotes. La manera como ciertos obispos reaccionaron en la época era “defensiva y centrada en la institución, lo que sería totalmente inaceptable hoy”, dice el texto.

El informe sobre la diócesis de Derry (Irlanda del Norte) señala, por su parte, 31 casos de abusos pedófilos cometidos por 23 sacerdotes. A menudo el problema fue “tratado cambiando de afectación” a los sacerdotes concernidos.

Y “sacerdotes que fueron desplazados siguieron cometiendo abusos”, constata el informe sobre Derry.

Otras diócesis (Dromore, Kilmore, Ardagh y Clonmacnoise) fueron también objeto de investigaciones. La investigación sobre Dromore (Irlanda del Norte) da cuenta de 35 casos cometidos por 10 sacerdotes, y señala que, en ciertos casos, “la buena reputación del sacerdote prevaleció sobre la seguridad de los niños”.

Los escándalos de pedofilia dentro de la iglesia irlandesa se sucedieron en los últimos años. Un informe publicado en julio sobre la diócesis de Cloyne provocó una violenta reacción del primer ministro Enda Kenny contra el Vaticano, acusado de obstaculizar las investigaciones.

A principios de noviembre, Irlanda decidió cerrar su embajada en el Vaticano, oficialmente por razones económicas.