¿Sufres con las arrugas que adornan tu cara? ¿Te gustaría reducir la cantidad de líneas que se lucen en tu piel? Por si no lo sabías, la solución a estos signos del “paso del tiempo” se encuentra… ¡En tu propio hogar!.

Lo anterior ya que ciertos elementos que las personas mantienen en sus casas -como alimentos y cremas reafirmantes- pueden ayudarte a reducir las arrugas de tu rostro de una forma simple y natural, como indicó la revista Reader’s Digest.

1.- Masajea tu rostro.

Día a día, tómate unos minutos para darle un suave masaje a tu cara con tu loción reafirmante favorita pues éstas ayudan a tonificar, reforzar los músculos y regenerar las células muertas de nuestra piel. Enfócate en las áreas problemáticas como el cuello, debajo de los ojos y en la frente.

2.- Jugo de limón.

El limón es un gran aliado de tu salud, ya que su acidez reduce la aparición de arrugas y ayuda a que tu piel luzca más brillante. Para aprovecharlo al máximo, es recomendable rebanar el limón y masajear las líneas y arrugas de tu piel con su jugo. Además, podrás convertir esta acción en una especie de aromaterapia que revivirá tus sentidos.

3.- Frutas y vegetales.

Para que tengas en cuenta, las frutas y vegetales frescos son ricos en vitaminas A y D, las cuales ayudan a cuidar tu piel y hacerla más brillante desde el interior. Para ello, es aconsejable adquirir jugos de estos alimentos o hacerte tus propias bebidas naturales.

4.- Aceite de oliva.

¿Sabías que el aceite de oliva ayuda a que tu piel permanezca suave y flexible? Para beneficiarte de éste, lo mejor es que por las noches apliques delicados masajes a tu rostro con unas pequeñas gotas de dicho líquido. Luego, deberás limpiarte con una toalla y ¡Voilà! ya verás cómo te sientes un poco más “joven”.

5.- Claras de huevo.

Finalmente, otra gran forma de reducir tus arrugas es poner varias claras de huevo en un recipiente pequeño y, con dicha sustancia, masajear tu piel. Luego, debes dejar que tu cara se seque y reposar por unos 15 minutos, tras lo cual será necesario limpiar tu rostro con agua caliente. Con esta simple acción, dejarás que las vitaminas B y E te rejuvenezcan.