Francia llamó este miércoles a las autoridades del Estado norteamericano de Georgia a no ejecutar a Troy Davis, al considerar que cometerían un “error irreparable”.

“Al ejecutar a un condenado sobre cuya culpabilidad existen serias dudas”, estas autoridades “cometerían un error irreparable”, declaró a la prensa el portavoz adjunto del Ministerio de Relaciones Exteriores, Romain Nadal.

“Francia lamenta enérgicamente el rechazo del comité de indultos del Estado de Georgia de conmutar la pena de Troy Davis”, dijo el portavoz, que llamó “al fiscal y a las autoridades de Georgia a detener la ejecución, debido a las serias dudas sobre su culpabilidad”.

La ejecución de Davis, un negro condenado a muerte por el asesinato de un policía blanco en una pelea en Savannah en 1989, tendrá lugar en una cárcel de la localidad de Jackson, 77 km al sureste de Atlanta, donde recibirá una inyección letal.

La decisión por mayoría simple de los cinco miembros del comité de indultos de Georgia se impuso contra una campaña sin precedentes a nivel internacional que llevó al ex presidente estadounidense Jimmy Carter, el Papa Benedicto XVI, otras celebridades e incluso a la Unión Europea a pedir la conmutación de la pena capital por una condena a cadena perpetua.