Un australiano fue detenido el martes en Estados Unidos en el marco de la investigación sobre la falsa bomba que tuvo una adolescente de Sidney atada al cuello durante diez horas, un hecho que mantuvo en vilo al país, indicó la policía australiana.
Un hombre de 50 años fue detenido en Louisville, en el Estado de Kentucky (centro este) al cabo de una operación conjunta con la Oficina Federal de Investigaciones estadounidense (FBI), precisaron los investigadores del Estado de Nueva Gales del Sur (sureste).
A principios de agosto Madeleine Pulver, de 18 años, hija de un adinerado empresario, pasó diez horas de horror luego de que un hombre ingresara en el domicilio familiar y le colocara un artefacto presentado como una bomba.
El individuo había dejado una nota, lo que indujo a la policía a sospechar de un intento de extorsión.
“En los últimos tres a cuatro días la policía de Nueva Gales del Sur, en estrecha colaboración con el FBI, identificó al hombre y descubrió que había viajado a Estados Unidos los últimos días”, agregó el jefe de la policía del Estado, Andrew Scipione.
“Se detuvo a un hombre en Louisville por un pedido de captura internacional”, declaró. La familia Pulver no conoce al sospechoso, aunque tienen vínculos indirectos, según la policía.
El hombre comparecerá ante un tribunal local. Australia quiere obtener su extradición.