El ejército y la policía israelíes mantenían el domingo el estado de alerta debido a posibles manifestaciones palestinas en el 44º aniversario de la “Naksa”, la derrota de las fuerzas árabes ante Israel durante la Guerra de Seis Días, en 1967, según fuentes militares.

A pesar de la calma que reinó durante las últimas 48 horas y de la prohibición decidida por el ejército libanés de una manifestación prevista el domingo en la frontera con Israel, los refuerzos israelíes enviados a la frontera con Líbano no fueron retirados, de acuerdo con esas fuentes.

Por otra parte, se concentraron numerosos efectivos para hacer frente a toda eventualidad en el norte de la meseta del Golán, en el sector de Majdal Shams, la capital de provincia de las localidades drusas de esa meseta, constató un corresponsal de la AFP.