El uruguayo Peñarol clasificó a la final de la Copa Libertadores de América 2011 pese a caer 2-1 (1-1) este jueves ante el argentino Vélez Sarsfield en Buenos Aires, en partido revancha de semifinales tras la victoria 1-0 que obtuvo en la ida la semana pasada en Montevideo.

Peñarol hizo valer su anotación como visitante para deshacerse de Vélez y obtener el boleto que lo habilita a disputar la final de la Copa con el brasileño Santos.

El gol del equipo uruguayo lo anotó Matías Mier (33), mientras Vélez sumó con los aportes de Fernando Ortiz (44) y Santiago Silva (66), que erró un penal en el complemento.

El partido se disputó en el estadio José Amalfitani y ante unos 45.000 espectadores.

Peñarol, cinco veces campeón de la Libertadores (1960, 1961, 1966, 1982 y 1987), hizo valer sus pergaminos desde el inicio y se metió en el juego con aplomo, mientras Vélez fue presa de la desesperación y pagó caro sus desaciertos.

A los 2 minutos el uruguayo Alejandro Martinuccio puso en apuros a Vélez con un remate de zurda que terminó en las manos del arquero Marcelo Barovero, pero la llegada temprana inquietó al anfitrión al punto que el DT Ricardo Gareca debió hacer señales de calma a sus jugadores.

Vélez tuvo dificultades para crear espacios por los laterales y la tensión de sus jugadores se tradujo en múltiples imprecisiones, mientras Peñarol se fue acomodó al juego con serenidad.

Una multitud de hinchas de Peñarol alentó al equipo uruguayo en una marea negra y amarilla con unas 5.000 almas.

Peñarol neutralizó las jugadas de triangulación de Vélez que parecía incómodo en el campo de juego sin encontrar espacios.

Recién a los 17 minutos Vélez consiguió la primera llegada complicada con un centro del ‘Tanque’ Silva que la defensa de Peñarol pudo despejar.

El uruguayo Matías Mier sacó un centro impecable pero Martinuccio lo desperdició con un cabezazo que se fue por encima del travesaño, en el primer gol que perdió Peñarol a los 20.

Lentamente Vélez comenzó a apoderarse de la pelota y a ensayar variantes para perforar el juego cerrado que propuso Peñarol.

A los 23 minutos un certero cabezazo de Silva fue abortado por el defensor de Peñarol Guillermo Rodríquez, que como una pared humana tapó con su cuerpo el remate de Juan Manuel Martínez.

Pero a los 33 minutos y justo cuando Vélez comenzaba a despertarse, Alejandro Martinuccio gambeteó a dos rivales por el centro y con un pase al lateral se la entregó a los pies a Matías Mier que la estrelló en la red para sumar el primer grito de Peñarol.

El gol dejó sin consuelo a los jugadores de Velez obligados de ahí en más a buscar tres para poder deshacerse de los uruguayos.

Lejos de la desesperación Vélez presionó y Emiliano Papa consiguió un gol que terminó anulado por posición adelantada.

A los 43 minutos los ánimos se crisparon entre los jugadores cuando un defensor uruguayo cortó un ataque peligroso de Silva en el área chica y el argentino Fernando Ortiz, que no había participado en la jugada, terminó amonestado por protestar.

Pero sobre el final del primer tiempo Vélez encontró su chance en una jugada de pelota parada que remata en los antebrazos del arquero de Peñarol para terminar a los pies de Tobio que apenas la empuja para conseguir el empate a los 46 minutos de juego.

En el complemento Vélez tuvo más la pelota y el partido adquirió un ritmo electrizante.

A los 62 minutos Olivera se perdió una chance al desperdiciar con un tiro desviado un mano a mano con el arquero tras un pase magistral de Martinuccio, la figura de la escuadra uruguaya.

Pero a los 66 minutos Santiago Silva tomó un pase por el centro y reventó la pelota dentro de la red para anotar el segundo gol del equipo de Gareca y enfervorizar a la hinchada velezana que transpiraba pese a la noche helada.

Una falta de Fernando Ortíz sobre Martinuccio le valió la expulsión a los 69 y Vélez quedó con un hombre menos.

Un penal para Velez llegó a los 74 minutos por una falta contra Martínez sobre la franja límite del campo de juego, pero cuando la hazaña parecía completada, Silva se resbaló al ejecutar y la pelota se fue por encima del arco.

El tiro fallido dejó a miles con el grito de gol atragantado en la garganta y la certeza de que Vélez estuvo a un paso del triunfo.

De esta forma, el cuadro manya disputará la final del torneo de clubes más importante del continente frente al Santos de Brasil.