La federación indonesia de fútbol (PSSI), en plena crisis por su incapacidad de nombrar a un presidente, mandará a uno de sus responsables a la sede de la Federación Internacional (FIFA) en un intento de impedir una sanción del máximo organismo del fútbol mundial.

“El objetivo de mi visita a Zúrich es luchar para que no recibamos sanciones”, dijo Agum Gumelar, presidente del llamado “comité de normalización”, en una conferencia de prensa televisada.

La federación indonesia fracasó la semana pasada en nombrar a un nuevo presidente por disputas internas y se expone ahora a las sanciones de la FIFA, que podrían llegar hasta la expulsión.

“Estoy seguro de que el 99% de la gente de Indonesia no quiere recibir sanciones. Esperamos poder lograr una decisión que nos sea favorable o, como mínimo, sanciones leves”, añadió Gumelar, cuyo comité de normalización fracasó en nombrar a una nueva directiva.

Indonesia, un país de 230 millones de habitantes, está en el puesto número 130 del ranking mundial de la FIFA de las mejores selecciones del mundo, por detrás de Etiopía y Yemen.