Chile no emitirá declaraciones sobre Perú en medio de su proceso electoral, luego que los candidatos a la presidencia de ese país, Ollanta Humala y Keiko Fujimori, instaran a Santiago a disculparse por dos recientes casos de espionaje y la venta de armas a Ecuador en 1995, dijo el canciller Alfredo Moreno.

“No nos pronunciaremos sobre materias relacionadas con nuestro país que en estas circunstancias puedan ser esgrimidas en el debate interno de los peruanos, lo cual podría dar pie a interpretaciones inconvenientes para nuestras relaciones”, advirtió Moreno en declaraciones al diario El Mercurio.

El lunes, el canciller había asegurado que Chile mantendrá “las mejores relaciones” con el presidente que Perú escoja.

Humala, quien se medirá en la segunda vuelta del 5 de junio a Keiko Fujimori, pidió a Chile pedir perdón por dos casos de espionaje, uno en 1970 que derivó en el fusilamiento de un militar peruano, y otro que involucró al ex suboficial de la Fuerza Aérea peruana, Víctor Ariza, condenado en 2009 en su país a 35 años de cárcel por espiar a favor de Chile.

También conminó a Chile a excusarse por la entrega secreta de armas a Ecuador durante la guerra que ambos países libraron en 1995, pese a que Santiago era garante de un protocolo de paz entre las partes en conflicto.

A la petición de Humana se sumó luego Keiko Fujimori, hija del encarcelado ex mandatario Alberto Fujimori (1990-2000).

Parlamentarios chilenos rechazaron las declaraciones de los candidatos peruanos.

“No pensé que ocuparían tan pronto un discurso nacionalista para conseguir apoyo interno. Esto abre interrogantes para las relaciones bilaterales”, dijo el senador oficialista Hernán Larraín.

Mientras que para el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del senado chileno, Eugenio Tuma, Humala y Fujimori recurren a “frases antichilenas” para ganar “la simpatía del electorado” de su país.

Perú demandó en 2008 a Chile ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, al estimar que los límites marítimos entre ambos países no están delimitados, cuestión que el Gobierno de Santiago rechaza.