Rectores de las universidades privadas acusaron de competencia desigual y discriminación la entrega de los resultados de la PSU. Tendrán acceso a ellos cinco horas más tarde que a las casas de estudios tradicionales.

Como una traba administrativa calificaron los rectores de las universidades privadas la decisión del Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas, Cruch, de entregar los resultados de la PSU cinco horas después de las casas de estudios estatales.

Esta medida impide a las instituciones privadas reunir a los mejores puntajes en sus filas, generando una competencia desigual, así lo manifestaron los rectores.

El rector de la Universidad San Sebastián, Ricardo Riesco, afirmó que existe información privilegiada, lo que perjudica directamente a las universidades privadas.

Las máximas autoridades universitarias indicaron de que este retraso se repite todos los años, pero que en esta ocasión, se incrementó las horas de espera.

En esta línea, el rector de la Universidad Adolfo Ibáñez, Andrés Benítez indicó que las universidades tradicionales buscan entorpecer el proceso de postulación en las instituciones privadas.

Así el rector de la Universidad Mayor, Rubén Covarrubias, cuestionó este desface de la entrega de información, ya que afirmó que al igual que las otras universidades, pagan para obtener la nómina.

Ante estas críticas, el presidente del Consorcio de Universidades del Estado de Chile, el rector de la Universidad de Santiago, Juan Manuel Zolezzi, insistió en que esta tardanza es parte del compromiso de entrega de los datos.

Zolezzi aclaró que la PSU es propiedad del Consejo de Rectores y que las universidades privadas pagan para acceder a esta base de datos y deben aceptar las condiciones de horario.