Francia sigue afectada por dificultades en el suministro de combustible como consecuencia de huelgas en las refinerías y de bloqueos de los depósitos en protesta contra el proyecto de reforma del sistema de jubilación, indicó el domingo ministerio de Energía.

“La situación es casi igual a la de ayer. En la región parisina el 35% de las estaciones de servicio no tienen combustible o les falta al menos un producto y en el oeste un tercio de los negocios tienen verdaderas dificultades”, indicó a la AFP una portavoz del ministerio.

Siete departamentos franceses registraban penuria de combustible, señaló.

El ministro de Energía, Jean-Louis Borloo declaró el domingo por la noche a la AFP que podría “haber algunas dificultades el lunes por la mañana” en el abastecimiento de las gasolineras desprovistas de carburante debido a que los conductores de camiones cisternas descansaron el domingo. Pero precisó que no significaría una agravación de la penuria.

“Como los conductores se encontraron con jornadas de trabajo enormes”, para abastecer a las gasolineras, “están obligados por motivos de seguridad a descansar y ha caído en un domingo”, explicó Maxime Dumont de la Unión Federal de Carretera del sindicato CFDT.

Para facilitar la circulación este fin de semana, comienzo de las vacaciones de otoño, el gobierno francés declaró como prioritario el suministro de las estaciones de servicio de la red de autopistas, entre otras medidas.

Evocando una “lenta mejoría”, pero rehusando a dar una fecha para el regreso a la normalidad, Borloo había pedido el sábado que se reanudase la actividad en las 12 refinerías en huelga.

El ministerio de Energía evita desde hace dos días dar una estimación nacional de la cantidad de surtidores afectados por el movimiento de huelga. El viernes más del 20% de las 12.300 estaciones de servicio del país no tenían combustible.

La principal organización patronal francesa, MEDEF, expresó su alarma por la “gravedad del impacto” del conflicto social en la economía.

“Los retrasos considerables de las entregas que transitan por carretera” como consecuencia de la falta de carburante y “el cese o casi cese de las entregas de mercancías que transitan por el flete ferroviario” debido a las huelgas en la compañía de ferrocarriles “provocan disfuncionamientos graves en la mayoría de empresas industriales, de la construcción y de obras públicas”, lamentó.