El ex presidente colombiano Álvaro Uribe asumió este martes la responsabilidad jurídica y política por las actuaciones de un alto funcionario de su gobierno sancionado por la Procuraduría por conocer y no denunciar un presunto espionaje ilegal del servicio de Inteligencia (DAS).
“Yo asumo la responsabilidad jurídica y política por esa conducta. Por ende, me pongo a disposición del Congreso y de la Corte Suprema de Justicia”, dijo el ex mandatario en un comunicado fechado en ciudad de Guatemala y divulgado en Bogotá.
El lunes la Procuraduría (Ministerio Público), sancionó disciplinariamente al ex secretario general de la presidencia Bernardo Moreno con la destitución y lo inhabilitó para ejercer cargos públicos durante 18 años.
La entidad argumentó que Moreno, que ocupó ese cargo entre 2006 y 2010, se extralimitó en sus funciones al reunirse con funcionarios del servicio de Inteligencia (DAS) para conocer información sobre magistrados, políticos de oposición y periodistas, obtenida mediante investigaciones que contemplaron interceptaciones ilegales de comunicaciones.
La sanción de la Procuraduría alcanzó a otros ocho ex funcionarios del DAS, organismo que depende directamente de la presidencia.
En su comunicación, Uribe señala que asume esa responsabilidad si las actuaciones por las cuales fue sancionado disciplinariamente Moreno corresponden a las averiguaciones que hizo el funcionario con relación a posibles infiltraciones del narcotráfico “en asuntos de algunos magistrados”.
Uribe aseguró que su gobierno “dio garantías a todas las fuerzas políticas” y “la oposición las disfrutó plenamente”.
“En el debate y en la contradicción siempre he puesto las cartas sobre la mesa, no ha habido asomos en mi mente de interceptaciones”, agregó el ex mandatario.
Uribe reiteró también que durante su gobierno fue objeto de interceptaciones en sus comunicaciones, y nunca pudo averiguar la autoría intelectual.
