Si te consideras un emprendedor, pero tienes poco o nada de capital, no te angusties, con perseverancia y algo de ingenio podrás conseguir tu objetivo.
Foto: Bloggers Emprendedores
Para lograr desarrollar tu idea de forma más económica posible, te entregamos una serie de consejos que te ayudarán a idear un plan de negocios barato y efectivo. (Vía El Universal)
1. Aprovecha al máximo las herramientas que tienes disponibles: Usa tu computador, tu conexión a internet o cualquier herramienta que te sirva y tengas a la mano.
2. Rodéate de gente con experiencia: Conversa con empresarios y gente que tenga experiencia en el rubro en que te quieras desarrollar. Escucha sus consejos, sobre todo aquellos que adviertan acerca de lo que no debes hacer.
3. Estudia lo suficiente acerca del negocio al que te quieres dedicar: Si lo haces, tus futuros clientes te respetarán como profesional. Que no te vean como un novato que prueba suerte.
4. Inicia tu negocio en la casa: Comienza en tu propio hogar y te evitarás los gastos propios que implica instalar una oficina.
5. Abre un blog o diseña tu propio sitio web: Haz que tu página se vea profesional para que des confianza a tus futuros clientes. Además, así la gente podrá conocer tu negocio.
6. Aprovecha los softwares libres: Usa programas gratuitos disponibles en la web y todas las vías posibles para enviar tus aportes.
7. Escucha a otros, pero no demasiado: Es bueno escuchar los consejos de otros, pero muchas veces cuando comienzas proyectos nuevos hay quienes no lo entienden y los desaprueban. Por lo tanto, esos comentarios no los tomes demasiado a pecho. No te desanimes.
8. Aplica tus conocimientos a la nueva empresa: Haz por ti mismo todo lo que sepas hacer, de esta forma, te ahorrarás contratar personal.
9. Mantén tu situación fiscal en orden: Procura que tus documentos, asuntos financieros y trámites legales estén al día.
10. Analiza si este el momento adecuado: Muchas veces, hay un tiempo apropiado y otro malo para abrir un negocio. Debes consideras los aspectos cíclicos, la situación estacional y las condiciones actuales de acuerdo a tu negocio. Planifica en los meses buenos lo que sucederá cuando llegue el fin de la demanda de tu producto o servicio.
