El presidente de Ecuador, Rafael Correa, retenido desde la mañana por policías sublevados en un Hospital de Quito, en medio de un combate entre éstos y militares leales al gobierno fue rescatado, constataron periodistas de la AFP en el lugar. Fue rápidamente llevado de vuelta al Palacio Presidencial.
Policías sublevados se enfrentaron a balazos esta noche con militares leales que ingresaron al hospital del norte de Quito siendo sacado en una camioneta resguardada por militares, según dijo a la AFP el viceministro de Interior, Edwin Jarrín.
Periodistas de CNN en el lugar han informado de varios uniformados heridos, sin que hasta ahora se detalle la cantidad de heridos.
El presidente de Ecuador ha salido del recinto, tras los violentos enfrentamientos, en una caravana de seguridad.
Uno de los militares que resguardaba esta caravana donde se traslada al mandatario, cayó desplomado herido de gravedad, siendo atendido por sus compañeros.
“Lo sacamos, lo sacamos”, dijo por teléfono a la AFP el viceministro, quien acompañaba a Correa en el momento de la evacuación.
El mandatario abandonó el sanatorio resguardado por soldados y un grupo élite de la policía que no se sumó a las protestas.
Correa hizo un primer intento para salir del centro médico, pero debió mantenerse en el sitio al arreciar el enfrentamiento a tiros, que se mantenía la noche el jueves en los alrededores del hospital.
Rápidamente Correa fue llevado al Palacio Presidencial donde desde un balcón se dirige a sus adherentes pidiendo un minuto de silencio por los fallecidos durante el reciente tiroteo.
