Este domingo será formalizado un hombre de 25 años que amenazaba con armas de fuego a los repartidores de pizza en Concepción.

No era la primera vez que Gerardo Castillo intimidaba a repartidores, a quienes hacía pedidos a su domicilio. Luego, para no cancelar la comida, les hacía creer que iría a buscar el dinero pidiéndoles que esperaran en la puerta, hasta donde volvía unos minutos después armado con una escopeta hechiza.

Al tanto de la situación, en un local de comida rápida del centro de Concepción se contactaron con efectivos de la policía de investigaciones, quienes siguieron al repartidor, sorprendiéndolo in fraganti.

El hombre, que presenta antecedentes por robo con intimidación y violencia, lo único que buscaba era el no pago de las pizzas, pues no robaba ninguna otra especie. Durante esta jornada será puesto a disposición del Ministerio Público.