La Corte de Apelaciones de Concepción inhabilitó al Juez de Letras de Tomé para seguir sustanciando la causa en que la empresa Hera Bío-Bío y el esposo de la Intendenta de la Región del Bío-Bío luchan por la propiedad de un fundo de 157 hectáreas.

Imagen: Rafa Calero en Flickr

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Es un caso con muchas singularidades, donde la mayor de todas fue que el empresario Mauricio Pavez, esposo de la intendenta Jacqueline Van Rysselberghe, fue el único postulante al remate y quien adquirió en sólo 21 millones de pesos un fundo avaluado en 300 millones en el sector Curaco Alto de Tomé.

Ese terreno pertenecía a la empresa Hera Bío-Bío, la cual lo perdió porque supuestamente no respondió al pago de 500 mil pesos que debía hacer al abogado de su contraparte, lo que derivó en que el tribunal tomecino ordenara el remate del fundo

La empresa afectada protestó que nunca fue notificada por el tribunal de la resolución que le ordenaba pagar esos 500 mil pesos, y es precisamente ese, uno de los argumentos que llevó a la Corte de Apelaciones de Concepción a anular gran parte de lo obrado por el magistrado tomecino, Sebastián Álvarez

En fallo unánime, los ministros de la Quinta sala de la Corte penquista indican que Hera Bío-Bío tenía tres abogados defensores, por lo que el juez Álvarez debió notificar a todos de su decisión, lo que no ocurrió.

Ademas, los magistrados indican que el juez debió publicar en un periódico de circulación regional los avisos de remate del fundo, pero ello tampoco sucedió y sólo se hizo en una publicación de escasa circulación.

Por eso, la Corte de Apelaciones de Concepción estima que el juez tomecino Sebastián Álvarez ha vulnerado de manera significativa la normativa y ha dejado en la indefensión a la empresa, por lo que ordena dejar sin efecto gran parte de lo obrado por el magistrado y lo inhabilita para seguir en el caso.

A través de este lenguaje jurídico, los ministros estiman que hay ilegalidades en el remate que permitió a Mauricio Pavez quedarse con el fundo Curaco Alto, caso que ahora debería ser asumido por la secretaria del Juzgado de Letras de Tome, Karina Luna, y si ella se inhabilita deberá sustanciarlo un juez o secretario civil de Concepción.