El gobierno de Brasil considera importante que Honduras retorne a la Organización de Estados Americanos (OEA), y vería con buenos ojos medidas concretas en favor de la reconciliación en ese país, dijo este viernes el vocero presidencial Marcelo Baumbach.
“El presidente (Luiz Inácio Lula da Silva) no quiere que perdure una situación de ruptura del diálogo con el gobierno hondureño. En este sentido, continúa preocupado con la cuestión del precedente de ruptura institucional, pero considera importante el retorno de Honduras a la OEA”, dijo Baumbach.
“Es necesario que sean tomadas medidas internas”, como la “constitución de una comisión de verdad, tal vez, y también sería bueno el retorno del ex presidente Manuel Zelaya al país, para que se pueda iniciar una reconciliación nacional”, señaló el vocero.
Según Baumbach, Lula defenderá esta posición en la II Cumbre de América Latina y el Caribe y el XXI encuentro del Grupo de Rio en México, la próxima semana, pero “no llevará una propuesta concreta para el retorno de Honduras a la OEA, apenas la preocupación con el precedente sentado por el golpe de Estado”.
Honduras fue suspendida de la OEA luego del golpe que destituyó a Zelaya el 28 de junio pasado. El gobierno de Porfirio Lobo, vencedor de las elecciones realizadas a fines de 2009, aún lucha por obtener el reconocimiento pleno en la región.
Lula abordará asimismo la cuestión en los encuentros bilaterales que mantendrá con el presidente de México, Felipe Calderón, y dos días más tarde con Mauricio Funes, presidente de El Salvador.
Pocas semanas después del golpe de Estado en Honduras, Brasil se encontró en el centro de la tormenta cuando el depuesto presidente Zelaya reingresó al país y buscó abrigo en la embajada brasileña en Tegucigalpa, donde permaneció unos cuatro meses antes de ir al exilio en República Dominicana.