Jordania presentó ante la UNESCO una demanda con el fin de recuperar los Manuscritos del mar Muerto, alegando que Israel se apoderó de ellos durante la Guerra de los Seis Días, en 1967, informó el lunes un alto funcionario del gobierno jordano.

Jordania “presentó una demanda ante la UNESCO porque los manuscritos pertenecen” a este país, declaró el jefe del servicio jordano de Antigüedades, Rafea Harahshehan, en un comunicado.

“El gobierno posee documentos jurídicos que prueban que Jordania es propietaria de los manuscritos”, agregó, sin precisar la fecha en que fue presentada la demanda.

Los Manuscritos del mar Muerto, atribuidos a la comunidad religiosa judía de los Esenios, son documentos que dantan del siglo I AC, y tienen un gran interés histórico.

Los primeros fragmentos fueron encontrados en cuevas situadas a orillas del mar Muerto por un pastor beduino en 1947, e Israel recuperó un cierto número de ellos en un museo de Jerusalén Este, ocupada en la Guerra de los Seis Días.

A principios de diciembre, Jordania pidió a Canadá que decomisara los manuscritos, expuestos en Toronto, invocando la Convención de La Haya de 1954 sobre la protección de bienes culturales en caso de conflicto armado, de la que los dos países son firmantes.

Pero las autoridades canadienses consideraron entonces que “las divergencias respecto a los Manuscritos del mar Muerto deben ser resueltas por Israel, Jordania y la Autoridad Palestina” y que “sería inapropiado que Canadá interviniera” en el caso.

“Hasta ahora, Canadá se muestra reservado. Nosotros estamos estudiando diferentes opciones”, declaró a la AFP la ministra jordana de Turismo y Antigüedades, Maha Jatib.

Israel, por su parte, no reivindica la propiedad de dichos manuscritos y se considera solamente “guardián” de los mismos.