8 personas murieron este viernes en Karachi al derrumbarse una casa de presuntos insurgentes cuyos explosivos aparentemente estallaron de forma accidental, indicó la policía, menos de 2 semanas después de un atentado que mató a 43 personas en esta ciudad del sur de Pakistán.

Los policías y los artificieros sacaron los cadáveres, así como armas, granadas y chalecos con explosivos para realizar atentados suicidas, que se encontraban bajo los escombros de esta vivienda situada en el barrio pobre de Baldia Town, indicó un alto responsable policial, Abdul Majeed Dasti.

8 personas murieron en esta explosión, que se produjo a primeras horas de la mañana, señaló un responsable de la policía local, Fayyaz Jan.

Según el jefe de la policía de Karachi, Waseem Ahmad, la explosión fue ocasionada por la detonación accidental de explosivos almacenados en ese lugar. “La casa era utilizada por terroristas”, afirmó.

El anterior balance proporcionado por la policía era de 6 muertos.