La Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió el jueves que no se baje la guardia ante el virus pandémico AH1N1 que sigue siendo “inquietante” y pidió a la población que no evite las vacunas disponibles.

A pesar de las similitudes con la gripe normal en invierno y de numerosos casos sin gravedad, el nuevo virus AH1N1 sigue propagándose activamente en el hemisferio norte, provocando un número creciente de infecciones, explicó el consejero especial de la directora de la OMS para pandemias gripales, Keiji Fukuda.

“Algunas personas especularon sobre el hecho de que la infección pandémica era débil y la subestimaron”, dijo durante una entrevista telefónica.

Sin embargo, “en la OMS seguimos preocupados debido a una cantidad considerable de personas que desarrollan complicaciones graves o mueren”, agregó.

Una de las principales preocupaciones de la OMS, insistió el Dr. Fukuda, es que “la mayor parte de las personas” que deben enfrentar las formas más graves de este mal “tienen menos de 65 años, un esquema diferente de la gripe de temporada”.

Entre estos enfermos, la OMS constató que las personas que sufren de una enfermedad crónica son más frágiles, así como las mujeres embarazadas. A pesar de todo, algunas personas jóvenes que gozan de buena salud pueden sufrir complicaciones, explicó el Dr. Fukuda.

No hay que “simplificar la situación”, insistió, pidiendo a la población que no subestimara la eficacia de las vacunas.

“La OMS considera que estas vacunas contra el virus pandémico son muy útiles”, destacó, explicando que los programas de vacunación que comenzaron en unos 20 países demostraron que son “seguras”.

De acuerdo con los últimos datos de la OMS del 30 de octubre, el virus H1N1, que se ha convertido en el virus de la gripe dominante a nivel internacional, mató en siete meses a por lo menos 5.700 personas en el mundo, un incremento de 14% en una semana.