Bombas lacrimógenas, algunas barricadas, señalética sacada de cuajo, vidrios rotos y una carabinera cubierta con pintura, fueron parte los resultados de una protesta en repudio por la muerte de Jaime Mendoza Collio.
La manifestación comenzó en calma a las 19 horas con una rogativa mapuche. Sin embargo, un grupo de exaltados se atrincheró en plena Alameda entorpeciendo el tránsito lo que obligó la intervención de fuerzas especiales.
Según Carabineros, la presencia de encapuchados y anarquistas obligó un actuar rápido para restablecer el orden público.
El vocero de la Comisión Lingüística Mapuche, Eugenio Paillalef, organización que adhirió a la protesta, negó la presencia de anarquistas y atribuyó la acción de carabineros a una muestra de discriminación.
En un ir y venir, lo manifestantes se replegaron por todo el Barrio República. Trataron de reagruparse en algunas esquinas, pero la acción de Carabineros fue más rápida y efectiva.
El Jefe de la zona Metropolina, el General Raúl Arellano, relató a La Radio lo ocurrido con una patrulla que no participaba del operativo, pero que fue blanco de la ira de una turba de exaltados.
La patrulla terminó con el parabrisas y el vidrio posterior totalmente roto. No obstante, y a pesar de la violencia del ataque, ningún carabinero resultó herido a excepción de una efectivo que terminó cubierta de pintura.
Otra suerte corrieron 2 motoristas que recibieron sendos piedrazos en diferentes partes del cuerpo y resultaron con heridas de menor consideración.
Los manifestantes detenidos fueron trasladados a la Tercera Comisaría de Santiago donde se les realizó el respectivo control de detención.
