Georgia y Rusia conmemoran hoy el primer aniversario de la guerra que libraron por el control de la zona separatista georgiana de Osetia del Sur, en un marco de nuevas tensiones que causan preocupación internacional por la estabilidad del Cáucaso.

El presidente georgiano, Mijail Saakashvili, depositó una corona de flores en el monumento de los soldados muertos en combate.

Osetia del Sur, una región por la que se enfrentaron los dos países, organizará la mayoría de las ceremonias el sábado, debido a que el conflicto por el control de esta provincia empezó en la noche del 7 de agosto.

Por su lado, el presidente ruso, Dimitri Medeved, defendió el papel de Rusia, y aseguró haber tomado solo todas las decisiones.