Con un 66 por ciento de los votos, el Colegio de Profesores se inclinó por bajar el paro indefinido tras ocho semanas consecutivas de movilización. Si bien aún faltan cerca de 40 comunas por escrutar, la tendencia no se revertirá. El presidente del gremio señaló que de confirmarse los resultados preliminares, exigirán al Gobierno que se cumpla la última oferta, pese a que la propuesta fue rechazada por los profesores en la consulta del 10 de julio.

Con la participación de casi 20 mil profesores – prácticamente la mitad que en consultas anteriores – el Colegio de Profesores se manifestó a favor de bajar el paro indefinido, tras ocho semanas consecutivas de movilización y un evidente desgaste en la adhesión de las bases.

Si bien desde la directiva del gremio no quisieron ser categóricos con los resultados preliminares, donde un 66 por ciento se inclinó por terminar con el paro versus un 34 por ciento que estuvo por mantenerlo, el secretario general del Colegio de Profesores, Darío Vásquez, señaló que la tendencia es clara y que ahora habrá que idear un nuevo plan de movilización para obtener los puntos pendientes.

“Hay una tendencia, pareciera clara, por deponer el paro y mandatar al directorio nacional a elaborar un plan de acción y movilización, y que nos cumplan con el petitorio que estamos pidiendo”, señaló.

Aún cuando el presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, evitó dar por ganadora la opción 1 hasta no contabilizar el último voto, señaló que de confirmarse la tendencia, el siguiente paso será exigir al Gobierno que se cumplan los puntos alcanzados en la negociación, pese a que en la pasada consulta nacional del 10 de julio, las bases docentes rechazaron la última propuesta del Ejecutivo.

“Nosotros entendemos que lo que ya está firmado por la ministra y que está entregado oficialmente y públicamente, son temas que ya están en la agenda”, sostuvo.

“Lo que va a corresponder hacer en ese caso es empezar a exigir su implementación y lo más importante, porque eso dice el voto 1, si es que esa es la opción que en definitiva gana, inmediatamente implementar un plan de acción porque de ninguna manera detenemos la lucha por los temas pendientes”, advirtió.

Según Aguilar, son cerca de 40 las comunas que aún faltan por escrutar, resultados que serán dados a conocer al mediodía de este martes.

Archivo | Sebastián Beltrán | Agencia UNO
Archivo | Sebastián Beltrán | Agencia UNO

Si bien en las últimas semanas el conflicto se ha enfocado en la interna del Colegio de Profesores, el paro docente sigue afectando la aprobación de la ministra de Educación, Marcela Cubillos, quien según la última encuesta Cadem bajó 9 puntos en su gestión, ubicándose como la secretaria de Estado peor evaluada del gabinete.

Recordemos que la propuesta del Gobierno –la segunda desde que comenzó la huelga, el 3 de junio- no incluyó respuestas a tres de las demandas de los docentes, que fueron calificadas como “temas sensibles” para los cerca de 80.000 maestros que se encuentran en paro.

Estas exigencias se refieren a un bono para profesores de educación diferencial, que el gobierno se negó a pagar y que los profesores consideran como una “discriminación odiosa”, según ha señalado Aguilar.

También demandan la cancelación de una reforma al plan de estudios de enseñanza media anunciado por el Mineduc y el pago de una deuda que para los docentes es “histórica” y que la dictadura de Augusto Pinochet contrajo con ellos cuando municipalizó la educación chilena en 1986 y reajustó el 90% del sueldo base de los profesores, lo cual nunca se hizo efectivo.

La educación pública chilena es objeto desde hace más de una década de masivas protestas, que estallaron en 2006 con la llamada “Revolución de los Pingüinos”, llamada así por el atuendo de chaqueta azul y camisa blanca de los escolares que pedían el fin de una ley que traspasó la administración de los colegios a los municipios, dictada a fines de la dictadura.