Las autoridades de Colombia atribuyeron este miércoles a la guerrilla de las FARC un atentado contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas, el segundo más importante del país, con unos 780 kilómetros de extensión.

Según un comunicado del Ejército, entre la tarde y la noche del martes ocurrieron dos ataques con explosivos a la estructura del oleoducto, en zonas rurales del departamento de Norte de Santander y cercanas a la frontera con Venezuela.

“Las FARC, haciendo uso indiscriminado de artefactos explosivos improvisados, (…) interrumpieron el normal flujo del crudo” en el sector comprendido entre los kilómetros 419 y 359 del oleoducto, dijo el Ejército.

Con esta acción, se causaron “grandes daños a la población civil”, pues se produjo un “derrame de crudo sobre uno de los principales afluentes hídricos” de la región, explicó el comunicado.

Las autoridades aún no han determinado la cantidad de petróleo que se derramó, pero sí aseguraron que tropas militares están desplegadas en la zona para “permitir el acceso al personal que realizará la reparación de los tramos afectados”.

La compañía estatal Ecopetrol informó a su vez en un comunicado que adelanta labores en la zona para monitorear y contener el impacto ambiental del derrame.

El ataque contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas ocurre en medio de la arremetida que desarrolla en el país la guerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, comunistas), que sostiene diálogos de paz con el gobierno desde noviembre de 2012 en Cuba pero sin que se haya decretado una tregua en el terreno.

En las últimas semanas, y tras suspender el cese al fuego unilateral que mantenían desde diciembre, las FARC incrementaron su accionar violento, que ya deja seis fallecidos -cinco de ellos uniformados-, además de afectaciones ambientales y a poblaciones enteras, con ataques a infraestructuras energéticas y civiles, sobre todo en el suroeste del país.

El conflicto armado colombiano, de más de medio siglo, ha dejado oficialmente al menos 220.000 muertos y más de seis millones de desplazados.

Colombia es el cuarto productor petrolero de América Latina, después de Venezuela, México y Brasil, y produce alrededor de un millón de barriles de crudo diarios.