Charlotte Thomson,una joven oriunda de Newcastle en Inglaterra, se encuentra en el centro de la noticia tras revelar la curiosa historia del nacimiento de su pequeña hija.
Thomson, quien hoy tiene 21 años, asegura que se enteró que estaba embarazada cuando comenzó con el trabajo de parto, pues durante todo el proceso de gestación nunca presentó ni un sólo síntoma.
Según comentó al diario inglés Daily Mail, durante el embarazo tuvo sus períodos menstruales de forma regular y continuó usando la misma talla de ropa, pues subió sólo un kilo y medio durante los nueve meses.
Una noche despertó con fuertes dolores de estómago, pero no le dio mayor importancia y tomó paracetamol esperando que la ayudara. Como el malestar se hacía cada vez más fuerte, fue al baño y se dio cuenta que estaba sangrando.
La mujer había terminado su periodo días antes por lo que se asustó y acudió a un hospital, donde el médico le dijo que estaba a punto de dar a luz. Dos horas más tarde, nació Molly, quien hoy tiene dos años.
Al no saber que estaba esperando un bebé, la mujer hizo su vida normal e incluso bebía alcohol. “Mi abdomen estaba completamente plano, y tuve periodos regulares por lo que fue un shock cuando me enteré”, aseguró.
“No creí que estaba embarazada hasta que dí a luz. Estaba asustada de convertirme en madre por primera vez sin ninguna advertencia. Pero no cambiaría a Molly por nada del mundo, y me siento afortunada”, agregó.
La joven que curiosamente trabaja como enfermera, afirmó que lo único que sintió en este periodo fue un cansancio inusual, el que asoció con su estilo de vida nocturno y gusto por las fiestas. “Pensé que era por salir todo el tiempo”, afirmó.
Cuando estaba en el hospital llamó a sus padres, quienes tras la sorpresa pensaron que tenía pocos meses de embarazo y que estaba internada porque había tenido una pérdida. Sólo cuando llegaron se dieron cuenta que estaban a punto de convertirse en abuelos.
Nadie entendía qué pasaba, por lo que el médico les explicó que Charlotte no tuvo un abdomen abultado como suele pasar, porque la bebé estaba bajo sus costillas.
A dos años del nacimiento, la mujer no podría estar más contenta con la bebé que es fruto de una relación con un exnovio, quien no se ha hecho cargo de su hija.
