El cardenal Ricardo Ezzati confirmó este martes que el sacerdote Fernando Karadima, condenado por el Vaticano por cometer diversos actos de abuso sexual, sufrió un infarto.

Según fuentes consultadas por La Radio, el otrora párroco de El Bosque se encuentra internado desde el viernes en el Hospital Clínico de la Universidad Católica, donde debió ser sometido a una angioplastía debido a la gravedad de su condición.

Ezzati confirmó la información indicando que la situación se encuentra controlada.

Desde marzo Karadima vive en el Hogar de Ancianos San José, de las religiosas de la Congregación de Santa Teresa Jornet.

Karadima no cumplió una condena penal debido a que los delitos de los que fue acusado se encontraban prescritos. La justicia rechazó una demanda civil por $450 millones interpuesta contra el Arzobispado de Santiago que buscaba una indemnización para las víctimas, pero su apelación se encuentra en trámite.