Desconocidos pintaron un carro del Biotrén, que se encontraba estacionado en Coronel, lo que obligó a Fesur a retirar el vagón para su reparación y a desembolsar recursos para quitar la pintura.

Esta no es primera vez que grafiteros ensucian los coches, provocando que sean retirados del servicio, por al menos un día, y, además, deban destinarse millonarias sumas a lo largo del año para limpiarlos.

En ese contexto, el gerente de operaciones de Fesur, Jorge López, explicó que el equipo 122 se encontraba en el estacionamiento de Coronel los autores de los rayados se aproximaron al carro. El lugar cuenta con guardias, pero éstos no se percataron de los hechos.

Fesur debe destinar una millonaria cantidad del presupuesto para la reparación de los coches y este año se ha registrado un caso por mes.

El vagón deberá entrar a taller y, aunque será reemplazado para prestar servicio al Biotrén, no estará operativo durante al menos un día. Asimismo, retirar la mancha de pintura del grafiti, que afectó también al vidrio, podría incluso obligar a renovar toda la pintura del vagón de pasajeros.