Impacto generó un nuevo video que circula en redes sociales y que muestra la agresión mutua de dos estudiantes en Talcahuano, registro que abrió la discusión respecto al vacío en el que están los programas de convivencia escolar cuando se trata de situaciones ocurridas fuera de los establecimientos.
Las imágenes muestran que todo comienza como un juego, que pasa rápidamente a forcejeo y finaliza con golpes mutuos, mientras dos estudiantes -un hombre y una mujer- se arrastran en el pasto.
Las risas burlonas de sus “amigos”, que grabaron la acción, se mantienen hasta el final y de vez en cuando entra en la imagen un cigarro, aparentemente de marihuana.
Los hechos ocurrieron hace unas tres semanas en el exterior del Liceo Técnico C-25 de Talcahuano, protagonizado por dos compañeros de curso -de 14 años- y con uniforme.
Desde el municipio de Talcahuano expresaron su preocupación por este nuevo video, detallando además que la adolescente fue retirada del establecimiento el 13 de abril pasado, mientras que el joven lleva una semana sin asistir a clases.
El alcalde Henry Campos anunció una investigación para determinar responsabilidades, y poder verificar si es que hubo profesores que supieran de lo ocurrido.
La situación constituye otro hecho más ocurrido en el exterior de un recinto educacional, lo que no está contemplado en los programas de convivencia escolar, debido a que los lugares donde suelen ocurrir las peleas están muchas veces fuera de la jurisdicción de las comunidades escolares.
Lo anterior, a juicio del director regional de la Superintendencia de Educación, Dalton Campos, debe comenzar a regularse.
Los datos de maltrato físico entre estudiantes se han incrementado en la región en un 69%, ya que de 109 denuncias el 2015 se pasó a 185 el 2016. Además, estos hechos se dan principalmente en los sectores municipales y particular subvencionados -y donde el 57% de éstos tienen a mujeres como afectadas- concentrandos generalmente en la educación básica.
