Una invasión de turistas al Santuario de la Naturaleza de Cobquecura provocó la estampida de lobos marinos, ya que los visitantes, aprovechando el recogimiento del mar, caminaron los 50 metros que hay desde la costa para fotografiarse a centímetros de los animales.

El lugar no cuenta con vigilancia exclusiva en esta fecha, ya que el fenómeno ocurre usualmente durante febrero. Por ello, el alcalde de la comuna, Julio Fuentes, apeló a la prudencia de los visitantes.

“Se les está causando un daño a estos mamíferos y no podemos estar con 50 carabineros impidiendo el paso de la gente a las rocas, por eso yo apelo al sentido común”.

Zico Henríquez, vocero de la ONG OrcaChile, que hace 3 años trabaja en la protección de la fauna silvestre, describió que actualmente “los lobos están con crías recién nacidas, por lo que al tratar de arrancar los más grandes van aplastando a los más pequeños”.

Henríquez criticó además que “ni la municipalidad, ni Sernapesca, ni la Armada” ejerzan acciones para que se cumpla la normativa vigente, que prohíbe acercarse a los lobos a menos de 5o metros.

El 1 de septiembre de 1992 se promulgó el decreto 544, que declaró los Islotes Lobería y la Iglesia de Piedra de Cobquecura como Santuario de la Naturaleza.

Carabineros, advertido por esta invasión, llegó hasta las Loberías para notificar a los turistas, cursando algunas multas.