Luego de seis meses, Contraloría confirmó que la Municipalidad de Concepción “faltó a la probidad” al contratar al marido de una de sus funcioanrias, quien además, no realizó el servicio por el cual se le pagaron mñas de 6 millones de pesos.

En febrero de este año, el diputado de la UDI Enrique Van Rysselberghe y el concejal del mismo partido, Patricio Kuhn, solicitaron a la Contraloría que investigara la contratación – vía trato directo – de Alejandro Bianchi Akel.

El objetivo era impartir un curso de capacitación a funcionarios del DAEM de Concepción, sin embargo, éstos no se habrían impartido y se habría pagado 6 millones y medio de pesos a Bianchi.

Tras seis meses de indagatoria, el órgano fiscalizador concluyó que el profesional no cumplió con lo acordado, y además constató la vulneración del principio de probidad por parte de Caroline Quevedo, esposa de Bianchi, funcionaria de la Municipalidad de Concepción que influyó directamente en la contratación.

El parlamentario gremialista, Enrique Van Ryselberghe, quien aseguró que – a su juicio – es “el mas grave de todos”.

Desde la Municipalidad de Concepción, el director del DAEM, Carlos Mellado, afirmó que ya están informados de este dictamen; pero que sin embargo, están a la espera de los resultados de un sumario administrativo ordenado por este caso.

Con respecto a los más de 6 millones de pesos públicos que fueron desembolsados por el municipio por un servicio que no se concretó, Mellado aseguró que el destino de este dinero también debe ser decidido por el proceso administrativo que está en curso.