Una situación de discriminación durante el Festival de Viña del Mar acusan testigos, quienes indican que una pareja en silla de ruedas no pudo ver el espectáculo.

Lo anterior constituye un punto negro en los balances positivos que tanto autoridades como artistas han realizado en torno al evento musical.

Si bien existen lugares designados para las personas con discapacidad en la parte trasera de la platea, en esta ocasión se indica que la cercanía con el escenario no sirvió de nada.

La situación se agravó al comenzar la presentación del grupo Jesse & Joy, ya que las personas se pusieron de pie, impidiendo que los dos jóvenes pudiesen ver la presentación.

Incluso, uno de ellos debió usar su celular para intentar mirar a través de éste a sus artistas preferidos.

La denuncia salió a la luz a través del Facebook de Leonor Torres, quien detalló lo sucedido, agregando que cuando pidió a las personas que se sentaran, estos argumentaron que habían tomado asiento durante dos canciones y ahora les tocaba a ellos disfrutar.

Además, Leonor asegura haber conversado con los guardias de seguridad para conseguir un lugar donde estos dos usuarios de silla de rueda pudieran ver.

No obstante, le respondieron que desde la Municipalidad y la organización no existía autorización.

Al ser consultada al respecto, la alcaldesa de la ciudad jardín, Virginia Reginato, dijo que hay lugares designados y que si se necesitan más espacios los habilitarán.

Esta situación reabre el debate en torno a la atención que prestan los chilenos a las personas con discapacidad o simplemente, en palabras de la denunciante, solo se recuerda la inclusión cuando se desarrolla la Teletón.