En una encrucijada se mantienen el Gobierno Regional y la Municipalidad de Viña del Mar luego de que la empresa Stone S.A. abandonara una emblemática obra de reparación vial en el sector de Gómez Carreño, anunciando incluso acciones judiciales.

Tras la negativa dada por el Gobierno Regional a la cesión de créditos entre las empresas Stone S.A. y su filial Felipe de Paz, la entidad determinó abandonar las faenas viales de Gómez Carreño, que presentaban un 54% de avance desde noviembre, acusando gastos por sobre los 650 millones de pesos.

“Evitar dificultades tributarias”, fue el motivo dado por el GORE para su determinación, indicó el representante de la empresa, Henry Bochard, quien aseguró que fueron respaldados por Contraloría respecto a que el Servicio de Impuestos Internos se debiese hacer cargo del tema.

Con esta acción -además de la precautoriedad de las boletas de garantía- propusieron a la municipalidad dar término a las obras en mutuo acuerdo. Lo que fue negado por la instancia comunal, condicionando dicho término sólo en caso de que la empresa finalizara la siguiente etapa, que implicaría 45 días de extensión, abultando una deuda de más de 800 millones, según Bochard, quien adelantó que como empresa estudian realizar presentaciones judiciales.

Asumiendo el abandono de este emblemático proyecto como un tema entre el Gobierno Regional y la empresa, la alcaldesa de Viña del Mar, Virginia Reginato, lamentó esta situación y dio cuenta de las acciones que podría desarrollar el ente comunal.

El concejal Jaime Varas apoyó la visión de Reginato y adelantó que ante esta situación se deberá licitar nuevamente el proyecto.

El intendente de Valparaíso, Gabriel Aldoney, calificó como “absolutamente falsa” la visión entregada por la empresa.

La autoridad aseguró que la factura de agosto -correspondiente a 160 millones de pesos- fue devuelta por el Gobierno Regional luego de haber cancelado 6 facturas -sumando 3.900 millones de pesos-, que fueron emitidas previamente a que Stone realizara este trámite a través de una filial.

La autoridad fue enfática al señalar que la responsabilidad debe ser asumida por la Municipalidad de Viña del Mar y la firma.

Aldoney insistió en que la municipalidad debe resolver el problema a la brevedad. Asimismo, desmintió que la empresa cuente con el respaldo de la Contraloría y señaló que el órgano determinó que la decisión tomada por el GORE debía ser perfeccionada por un acto administrativo formal que no se realizó.