Una utilización más eficiente de la leña, así como de los calefactores y artículos relacionados es el secreto para evitar la contaminación del aire y con ello multas, indicó el presidente de la Asociación Gremial de la Leña (Enelsur), Robinson Ocks.
La entidad agrupa a más de 60 comerciantes del combustible natural, que desarrollan un acuerdo de producción limpia y que tienen en carpeta la construcción de un patio de energía sólida.
Robinson Ocks señaló que uno de sus objetivos es demostrar que no sólo las demás energías son limpias, sino que la leña también puede serlo, claramente si es que se sabe utilizar. Esto se puede realizar manteniendo una llama constante y erradicando costumbres que posibilitan el aumento de la polusión en el aire.
Ocks aseguró que el adquirir leña con un máximo de 25% de humedad, limpiar permanentemente bien los aparatos calefactores (de preferencia con doble cámara), dar apertura a los tirajes y picar la leña en diámetros que no superen los 6 centímetros, son parte de medidas efectivas que evitan que al manipular la madera se emitan humos visibles, lo cual está prohibido en tiempos de emergencia ambiental.
Respecto al tema de los precios, Ocks comentó que en promedio la compra de leña certificada y regularizada se ubica entre los 28 mil y 30 mil pesos, por lo menos 5 mil pesos más que la informal.
De todas formas justificó la diferencia de precio con el informal, pues la venta de leña certificada está gravada con impuestos y otro tipo de obligaciones legales y económicas, que obligan a que cumpla con los estándares de humedad requeridos para evitar que contaminen y generen multas en quienes la usan en tiempos de emergencia.
