La causa por el uso de un jet privado en la última campaña presidencial de Marco Enríquez-Ominami cuenta con un nuevo flanco.

La fiscal Ximena Chong indaga el posible delito de fraude al fisco por parte de ME-O en caso de comprobarse los dichos de Cristian Urizar, exdirector internacional de la brasileña OAS, quien en entrevista con La Tercera aseguró que el avión fue una donación de dicha empresa.

El problema es que el líder del PRO incluyó en su declaración ante el Servicio Electoral, dos facturas por $170 millones de Cono Sur Research, empresa perteneciente a su jefe de campaña, Cristian Warner, que según dijo correspondían al pago por el uso de ese jet privado.

ME-O obtuvo un reembolso por ese gasto, lo que constituiría fraude al fisco.

El presidente del Consejo de Defensa del Estado, Juan Ignacio Piña, señaló a El Mercurio que de acreditarse que servicios reembolsados como gastos electorales fueron en realidad una donación, se hace inevitable indagar una eventual defraudación fiscal”.