El fiscal nacional, Jorge Abott, confirmó el nombramiento del fiscal sur Raúl Guzmán a cargo de las denuncias que presentó el contralor general Jorge Bermúdez respecto a irregularidades en las jefaturas de finanzas de cinco entidades pùblicas.
Dicho anuncio fue realizado durante la mañana de este lunes, en medio de la ceremonia del 90 aniversario de la Contraloría General de la República (CGR).
Si bien ni Abott ni Bermúdez entregaron detalles de los involucrados, trascendió que una de las instituciones señaladas por el persecutor es el Ministerio de Obras Públicas (MOP).
En ese contexto, el titular de la cartera, Alberto Undurraga, señaló en la misma actividad que le pedirá al contralor que revele el nombre de la persona que estaría involucrada en actividades irregulares para así no ensuciar el nombre de los demás trabajadores.
Se trata de una serie de reacciones tras los actos del contralor Bermúdez, quien el jueves pasado presentó antecedentes ante el Ministerio Público denunciando irregularides que -según se lee en el respectivo oficio- “podrían revertir caracteres de delito, cometidos presumiblemente por los funcionarios públicos que en ellas se individualizan”.
Los antecedentes surgieron luego de una masiva fiscalización a más de 320 organismos públicos, la que derivó en denuncias contra jefes de servicio de un hospital regional y dos gobernaciones regionales, además de funcionarios de la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere) y el MOP.
En concreto, los antecedentes aportados por Contraloría General de la República revelan probables casos de negociación incompatible y conflicto de interés. Por ejemplo, según contó Bermúdez, uno de los involucrados tiene 5 autos de lujo.
Asimismo, en el informe de la CGR se destapan otros conflictos: ejercer como jefe de finanzas y ser miembro de sociedades (o vinculadas a familiares) que le prestan servicios a la misma institución para la que trabajan.
