Rectores de las Universidades de O’Higgins y Aysén respondieron a las críticas por el inicio de clases en instalaciones transitorias.

En salas modulares partirán sus clases los nuevos alumnos de la Universidad de O’Higgins, mientras que los de la Universidad de Aysén lo harán en salas acondicionadas en un exhotel.

María Teresa Marshall, rectora de esta universidad, señaló a La Radio que el lugar donde sus 90 estudiantes iniciarán las clases, había sido completamente remodelado y que ya no quedaba nada que lo hiciera parecer un hotel.

Consultada por la construcción del edificio que será la sede definitiva de la universidad, la rectora señaló que era un proceso que estaba pensado en un plazo de 5 años, y que tomaba este tiempo, ya que debía ser construida desde cero.

Agregó que al ser una obra que utilizaba fondos públicos, los procedimientos son distintos.

En la Universidad de O’Higgins en tanto, se han implementado salas modulares, mientras se espera la habilitación completa del edificio que albergaba al Hospital Regional, desocupado en abril del año pasado.

El rector Rafael Correa, hizo un llamado a tener confianza, ya que las salas en las que iniciarán sus clases estaban completamente equipadas y eran “tan buenas o mejores que las de los edificios”.

El rector defendió además la utilización de estos módulos.

Correa invitó a que las personas que criticaban el inicio de las clases en estas instalaciones, fueran a revisarlas entre el 1 y el 13 de marzo, fecha en la que comienzan las clases de los 450 alumnos matriculados.