Una columna de opinión de Carlos Peña fue el principal motivo para que Gabriel Boric, quien está siendo cuestionado por viajar, junto a su familia, a la isla Lennox en un buque de la Armada, emitiera una declaración pública a través de su página web.
El hecho, denunciado por El Muro, ocurrió el pasado 4 de febrero en la región de Magallanes, cuando el diputado y otros 28 familiares acudieron al lugar.
Según explicó, el viaje tenía por objetivo conmemorar a uno de sus ancestros, Ivo Boric, el primer integrante de ese apellido en llegar a Chile desde Croacia.
Boric detalló que “el homenaje consistía en un pequeño monolito con una placa recordatoria a instalar en Isla Lennox”, para lo que ya contaban con todos los permisos correspondientes, incluso el del Ministerio de Bienes Nacionales.
Según aclara Boric, “esta autorización, a su vez, señalaba que para viajar a la Isla era necesaria la coordinación y autorización de la Armada, ya que la Isla Lennox se encuentra bajo la tuición exclusiva de la Armada de Chile“.
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Por otro lado, informó que las conversaciones con la fuerza armada se realizaron en los meses subsiguientes, y que “yo no participé directa ni indirectamente en ninguna de estas gestiones”.
La “influencia”
El diputado por Magallanes argumentó que existe “un desconocimiento respecto del rol que juega la Armada en la conectividad de zonas extremas”.
Además, manifestó que “hay muchos casos de personas que previa solicitud formal han viajado a lugares remotos, como Puerto Edén o Juan Fernández, en embarcaciones de la Armada cuando hay disponibilidad de cupos y se enmarca en un viaje rutinario”.
El mayor problema para el parlamentario, surgió luego de las acusaciones que decían que él habría usado su cargo para obtener las autorizaciones de abordar la nave.
Boric aseguró que él no hizo gestión alguna para materializar el viaje, aunque sí dijo que “creo que existe una duda razonable sobre el asunto”.
“Vale pedir excusas a quienes han visto en este episodio un hecho de uso injustificado de privilegios”, dijo el parlamentario, aludiendo a que se debe exigir un estándar mayor en quienes se dedican a los asuntos públicos.
Finalmente, el diputado ofreció disculpas a la institución por los problemas que surgieron tras el episodio.
“Ofrezco además mis disculpas a la Armada de Chile por haberla envuelto en esta polémica que podría haber sido prevista. Y en esto la responsabilidad es mía”, puntualizó.
