Un nuevo “crimen de honor” se registró en Afganistán, luego de que una niña de 14 años muriera tras ser quemada, con el objetivo de saldar una disputa entre dos familias.

Además, la niña presentaba un avanzado embarazo, aunque no se ha precisado la cantidad de meses en específico que llevaba con esta condición, consigna diario El Mundo de España.

De acuerdo a fuentes policiales, el asesinato de la víctima, identificada como Zahra Azam, se debería a una antigua práctica ancestral, donde familias o tribus ofrecen a niñas o mujeres para zanjar enfrentamientos con otros grupos.

Si en un caso particular, se considera que una familia ofendió el honor de otra, se puede sacrificar a la mujer ofrecida, como fue el caso de Zahra.

Entregada como dote

La historia de sufrimiento de Zahra empezó hace dos años, cuando su padre la entregó como dote a la familia de su nueva esposa, obligando a la niña a casarse con uno de los hijos de su suegro.

De acuerdo al padre de la víctima, la niña fue agredida física y psicológicamente por su marido desde que se efectuó el matrimonio, además de también ser atacada por su familia política, quienes la quemaron viva pese a que sabían que estaba embarazada.

Debido a este crimen, el suegro de la víctima fue arrestado y se investiga su responsabilidad en el asesinato de Zahra.

De igual modo, el padre de la víctima y quien entregó a la niña a sus presuntos victimarios, pide justicia, aunque cree que no llegará, pues la familia de su esposa tiene mucho poder.

“Esa familia tiene mucho poder en la región y pondrán a los tribunales a su favor”, señaló el hombre.

Los “crímenes de honor” son uno de los principales problemas sociales de Afganistán, pues según datos del Ministerio de la Mujer de ese país, en los últimos 3 meses se han producido cerca de 600 casos de este tipo, mientras que en el transcurso de 2016, se han denunciado 2.579 episodios de violencia contra la mujer en dicho país.