Cualquiera podría pensar que el primer trabajo que le permitió a un actor comenzar una carrera exitosa y acumular grandes cantidades de dinero, sería recordada al menos con cariño. Sin embargo, existe un grupo de artistas en Hollywood, que realmente odian las series que los lanzó a la fama.
Este grupo no sólo detesta sus ex programas, sino que además no tienen problemas en hablar de ellos con la prensa. A continuación, te contamos la historia de algunos de ellos.
1. Angus T Jones – Two and a Half Men
A pesar que comenzó a trabajar a los cinco años, su gran saltó lo dio a los nueve años cuando fue seleccionado para interpretar a Jake Harper y unirse al elenco estable de la sitcom Two and a Half Men.
El niño firmó un contrato en el que se estipulaba que recibiría 7.8 millones de dólares (más de cinco mil millones de pesos chilenos) cada 2 temporadas, más un bono de 500 mil dólares (más de 350 millones de pesos chilenos) por compensación. Esto lo convirtió en uno de los actores infantiles mejores pagados de Hollywood.
Durante su estadía en la serie, Angus comenzó a tener problemas de conducta y de drogas, especialmente luego que sus padres se divorciaran. Tras un fuerte accidente, el joven artista señaló que tuvo un “despertar espiritual hacia Dios” y se unió a una congregación adventista. Tras esto, ya no se sentía cómodo con su personaje en la serie y comenzó a criticar el espacio que lo había hecho saltar a la fama.
“Jake de Two and a half men no significa nada. Es un personaje que no existe”, dijo en un video casero de su comunidad. “Estoy en la serie y no quiero estar allí… si ustedes ven Two and a Half Men, por favor dejen de hacerlo y de llenar su cabeza con porquería”, agregó.
“La gente dice que es sólo entretenimiento, pero hagan una investigación sobre los efectos de la televisión en su cerebro, y les aseguro que tendrán que tomar una decisión en lo que respecta a la televisión”, explicó.
Tras dicho episodio, el actor comenzó a tener apariciones irregulares en la serie que posteriormente fue protagonizada por Ashton Kutcher. Hoy, con 22 años, está alejado del mundo del espectáculo y estudiando en la Universidad de Colorado.
2. Mischa Barton – The OC
Tras varios años trabajando en el cine y en la televisión, Misha Barton se convirtió en la protagonista de The OC (serie en la que se inspiró Medcezir), una emblemática serie para adolescentes de principios de siglo que la transformó en toda una estrella.
Marissa Cooper era el nombre de su personaje, que con hoy en día dice que jamás se aceptaría interpretar. “Es algo que estuve tan cerca de no hacer. Por aquella época sentía algo muy grande hacia el cine. La gente me decía que fuese agradecida con lo que tenía, pero simplemente es que no era lo que quería hacer o lo que quería ver”, señaló hace un tiempo al diario ingles Metro.
Tras tres años en la serie, con varios incidentes de por medio, su personaje falleció en un accidente de autos. A las pocas semanas, la actriz fue arrestada por conducir bajo la influencia del alcohol y posesión de marihuana.
“¿Podrías pensar que es bueno poder vivir también en un mundo paralelo, uno en el que nuestras vidas resultan ser diferentes, pero sólo tienes que ver el episodio de The OC ‘The Chrismukk-huh?’ para darse cuenta de lo terrible que puede ser”, agregó.
3. Penn Badgley – Gossip Girl
El actor que dio vida a Dan Humphrey durante años, nunca estuvo muy contento con su trabajo y tras el fin de la serie no tuvo problemas en dar a conocer su opinión, especialmente con el hecho de que su personaje fuera el misterioso autor tras Gossip Girl. “No tiene sentido para nada. Gossip Girl no tiene sentido”, agregó.
“Tuve que morder mi lengua. El final fue extraño para mí, para todos nosotros… Ese ha sido mi problema con televisión, comienzas con algo real y eventualmente todo se transforma en algo completamente diferente. ¿Cómo estás seis personas (los protagonistas) siguen juntándose cada .día? Es una maldita locura. Es imposible. ¿Quiero decir, por qué esas personas se siguen juntándose, siquiera? , señaló.
“Y no es culpa de nadie. Eso no es culpa de los escritores. Es sólo la naturaleza de la televisión. Y es por eso que después de tantos años de trabajar en el programa, yo pensaba, ’ en serio, ya no puedo hacer esto’. No quiero desacreditar cualquier éxito que tenga, pero ahora ser famoso, tener éxito, o lo que sea, está en una gigantesca área gris”, continuo.
Pero para dejar aún más claro su descontento con la serie, dio a entender que nunca se sintió orgulloso de su trabajo en el programa. Así al menos lo dijo mientras promocionaba su cinta Greetings from Tim Buckley. “Apesta cuando la gente me llama Dan y piensa que soy él”, dijo.
“Estar orgulloso de algo es una sensación realmente linda… y es un nuevo sentimiento para mi, es algo que quiero seguir haciendo. Puedo caminar con la frente un poco más en alto sin tener que estar disculpándome por el trabajo que he hecho en el pasado”, agregó.
4. Shannen Doherty – Charmed
Más allá de los conflictos mediáticamente conocidos entre Shannen Doherty y Alyssa Milano, la actriz nunca se sintió realmente cómoda con Charmed. A pesar que su personaje Prue Halliweell era uno de los favoritos del público, desapareció en la tercera temporada.
Y es que a pesar de la entrega que tenía la actriz hacia su personaje, la serie finalmente no le daba el tratamiento adecuado a su actuación.
“En Charmed hubo momentos en los que realice actuaciones brutalmente honestas como actriz Lo que vieron venía desde mis entrañas, pero cuando vi esos momentos en la serie me di cuenta que no se le dio el tratamiento adecuado, porque estaban en Charmed, que era un programa para niños de 12 años”, agregó.
5. Billy Ray Cyrus – Hannah Montana
Aunque llevaba años trabajando en su música, el padre de Miley Cyrus alcanzó la fama mundial junto a su hija gracias a la serie Hannah Montana en Disney.
En la serie interpretaba al padre de su propia hija, y vio cómo su pequeña se fue transformando con el paso del tiempo, dejando de ser la niña de sus ojos para convertirse en una joven rebelde sin pelos en la lengua.
La fama además tuvo como consecuencia su divorcio, tras lo cual todo se salió de control y el resto de sus hijos se convirtieron en el centro de la atención de la prensa.
“Te lo diré ahora— el maldito programa destruyó mi familia”, señaló. “Regresaría todo en un segundo. Por el bien de mi familia, por estar aquí y bien, sanos y salvos, felices y normales (…) Si pudiera, borraría todo lo pasado en un segundo”, agregó.
