La actriz Melissa Gilbert, conocida por su rol de Laura Ingalls en La pequeña Casa en Pradera, denunció al director de cine Oliver Stone de haberla acosado sexualmente durante el casting para la cinta The Doors.
En una entrevista con presentador Andy Cohen, la actriz de 53 años contó que todo ocurrió en 1991, cuando durante el casting el cineasta le habría dicho que tenía una “escena especial” preparada ella.
“Me hizo leer una escena. Audicioné, y entonces dijo: ‘escribí esta escena especialmente para ti. Me gustaría que la hicieras con un actor. Quiero ver la química entre ustedes dos"”, contó Gilbert.
“La escena era mi personaje hincada diciendo: ‘hazmelo, baby’. Realmente sucio, realmente horrible. Entonces él -Stone- me dijo, ‘Me gustaría que lo escenifiques para mí"”, aseguró la artista en el programa de radio.
La situación puso realmente incómoda a Gilbert, quien decidió irse del lugar. “Salí llorando (…) Fue humillante y horrible”, relató y afirmó que toda la situación era una venganza por una antiguo comentario realizado por ella.
“Nunca he hablado de esto (…) Todo lo que hizo fue porque dije algo que le avergonzó públicamente”, contó
La respuesta de Stone
Frente a la viralización de la historia, el cineasta decidió responder a las acusaciones a través de una declaración pública, dada a conocer por New York Daily Mail.
“Audicionamos a docenas de actores para los roles en ‘The Doors’ y desde el principio se dejó en claro que nuestra película iba a ser una película de rock ‘n’ roll obscena y sin restricciones. A todos se les dijo que las escenas serían ensayadas y realizadas a partir de un guión, con mi directora de casting, Risa Bramon Garcia, presente durante todo el proceso para garantizar un ambiente seguro para todos los actores que participara”, dijo.
“Ningún actor fue forzado ni se esperaba que hiciera nada que pudiera ser incómodo, y la mayoría de actores aceptaron el reto, reconociendo la visión de Oliver Stone y el proceso creativo”, agregó la mencionada directora de casting.
